La amortización contable es un procedimiento de contabilidad que se usa para reconocer el costo de determinados activos a lo largo del tiempo. Esto se hace mediante la asignación de los costos iniciales del activo a los periodos en los que se obtienen sus beneficios económicos. De esta forma, la amortización contable ayuda a reflejar el rendimiento financiero real de un activo en el balance general.
¿En alguna ocasión te has preguntado cómo los activos de tu empresa se registran en tu balance general? La respuesta es la amortización contable, un proceso de contabilidad que ayuda a reconocer el costo de los activos a lo largo del tiempo. Esta técnica asigna los costos iniciales del activo al periodo en el que se obtienen beneficios económicos, reflejando así el rendimiento financiero real del mismo.
En este artículo hablaremos sobre los diferentes tipos de amortización contable, qué es el cuadro de amortización y cuáles son sus componentes, y la diferencia entre la amortización contable y fiscal.
Tipos de amortización contable
Existen tres métodos principales que se pueden utilizar para amortizar los activos: lineal, diferida y saldada.
- Amortización Lineal. Esta es la forma más simple y directa de amortizar un activo. Básicamente, con este método se divide el costo total del activo por el número de años previstos para su vida útil. La cantidad resultante es lo que se conoce como la depreciación anual. Esta cantidad será deducida de los ingresos cada año hasta que el valor total del activo sea cero.
- Amortización Diferida. El método diferido de amortización implica hacer pagos periódicos sobre el valor residual o “saldo debido” del activo. La cantidad pagada será igual al valor restante dividido entre el número restante de años en su vida útil prevista. Este método implica realizar pagos menores al principio y mayores al final.
- Amortización Saldada. El tercer tipo principal es la amortización saldada. Este método implica pagar todo el saldo debido al final del periodo contable (generalmente 1 año). Esta es la forma menos común y no es recomendable ya que requiere muchas provisiones financieras adicionales para cubrir los pagos finales.
¿Qué es el cuadro de amortización y cuáles son sus componentes?
Un cuadro de amortización es una herramienta financiera que registra todos los pagos realizados a lo largo del tiempo para los préstamos. Esto incluye el pago de intereses, la cantidad restante del préstamo y el saldo pendiente. El cuadro de amortización ayuda a los prestatarios a entender cómo se está desarrollando el proceso de devolución del préstamo.
Un cuadro de amortización consta de varios componentes:
- Monto del Préstamo. Esta es la cantidad total que se le ha otorgado al prestatario en un principio.
- Tasa de Interés. Esta es la cantidad anual que el prestatario tendrá que pagar como parte del préstamo.
- Plazo. Esta es la cantidad total de meses o años durante los cuales el prestatario tendrá que pagar el préstamo.
- Pagos Mensuales. Esta es la cantidad mensual que tiene que ser pagada por el prestatario para devolver el préstamo en su totalidad durante todo su plazo acordado previamente con su prestamista.
- Amortización. Esta es la cantidad exacta utilizada para reducir el saldo principal del préstamo con cada pago mensual y se compone principalmente por una parte intereses y otra parte capital amortizado (principal).
- Saldo Pendiente. Este número muestra cuánto dinero queda por devolver después de cada pago mensual y se reduce con cada abono realizado por parte del prestatario hasta llegar a 0 al final del plazo acordado previamente con su prestamista.
Diferencia entre amortización contable y fiscal
A continuación se explican las principales diferencias entre la amortización contable y fiscal:
- Métodos. La amortización fiscal se realiza mediante el método de línea recta. Por otro lado, la amortización contable se realiza mediante una variedad de métodos como línea recta, saldo decreciente, etc.
- Fecha. La amortización fiscal comienza en el momento en que el activo entra en servicio. Mientras que la amortización contable comienza desde el momento en que se adquiere el activo.
- Tasa. La tasa de amortización para la amortización fiscal es fija mientras que para la contabilidad puede ser variable o incluso nula si no hay beneficios imponibles.
- Reglas. Las reglas para calcular la deducción por amortización son diferentes ya sea a nivel internacional o local. Asimismo, cada país tiene sus propias normativas fiscales relacionadas con las deducciones por amortizaciones.
- Impuestos. Los gastos relacionados con la amortización fiscal no están sujetos a impuestos. Sin embargo, los gastos relacionados con la contabilidad si están sujetos a impuestos.