El consignatario es la entidad, persona o empresa encargada de recibir los bienes en una operación de consignación. Es responsable de almacenar, realizar la venta y pagos derivados de ésta y devolver lo no vendido al propietario o consignador, manteniendo a su vez los riesgos que esto pueda implicar.
Adentrarse en el dinámico e intrincado mundo de la economía y las finanzas, es como iniciar un emocionante viaje por un laberinto lleno de términos y conceptos a veces difíciles de decodificar. Uno de estos términos es «consignatario». En la vida diaria, incluso sin estar totalmente conscientes de ello, coexistimos con múltiples formas de consignación,puede ser ese vecino que vende productos por catálogo o esa tienda local que exhibe artefactos en nombre de otros. Así es,el consignatario es aquel individuo o empresa que se encarga del resguardo y venta eventual de bienes que le son confiados. ¿Su principal labor? Lograr vender estos productos, realizando los pagos resultantes al propietario original, pero también asumiendo los riesgos si algo resulta mal en el camino. A lo largo del siguiente artículo navegaremos detenidamente en este concepto desde sus aplicaciones más básicas, ejemplificando su aplicación para una mejor comprensión y adentrándonos en su importancia dentro del comercio internacional.
Ejemplo de consignatario
Imaginemos una empresa de muebles artesanales llamada «Artesanía Gómez». Esta empresa en particular produce hermosas mesas y sillas únicas a mano. Aún así, su sede se encuentra en España y quieren expandir su mercado hacia Estados Unidos. Desafortunadamente, no tienen establecidas las infraestructuras necesarias para ello.
Entonces deciden un camino que les permite mantener su negocio en marcha sin asumir riesgos enormes: buscan a un consignatario. En este caso, el consignatario sería una tienda de muebles establecida en Nueva York llamada «Elegant Homes».
«Elegant Homes», como consignatario, acepta recibir una variedad seleccionada de los productos de «Artesanía Gómez» para exhibirlos en sus salones. Aceptan la responsabilidad de almacenar, promover y vender los muebles. Cada vez que se vende un producto, «Elegant Homes» cobra un margen o una tarifa razonable por el esfuerzo comercial realizado y luego remite el resto del dinero de la venta a «Artesanía Gómez».
Entonces veamos paso por paso como funciona este acuerdo:
- Primero, «Artesanía Gómez» envía sus productos a «Elegant Homes». Esto se realiza generalmente a través del sistema logístico existente y puede involucrar opciones de entrega tanto nacionales como internacionales.
- Tras recibir los productos, «Elegant Homes» los exhibe adecuadamente en sus salones e inicia la activación comercial para incentivar las ventas.
- Una vez vendido un artículo, el pago recibido se divide entre las dos partes según lo acordado previamente.
- El importe restante después del descuento del beneficio del consignatario es enviado a ‘Artesanía Gómez’.
Con este acuerdo ambos ganan: Artesanía Gomez accede al mercado norteamericano sin tener que invertir en infraestructura logística o puntos de venta localizados,mientras que Elegant Homes añade valiosos nuevos productos a su catálogo sin incurrir en costos altos.
Este ejemplo ilustra bien cómo funciona la relación entre el consignante (la empresa Artesania Gomez) y el consignatario (la tienda Elegant Homes). Se trata básicamente de una colaboración ventajosa donde ambas partes pueden beneficiarse con relativo bajo riesgo financiero directo, haciendo posible la expansión internacional incluso para pequeñas empresas artesanales con recursos limitados.
Consignatario en el comercio internacional
El consignatario juega un papel crucial en el comercio internacional. Funciona como intermediario entre el vendedor o exportador, también conocido como consignador, y el comprador o importador. Cuando nos referimos al ámbito del comercio internacional, hablar de un consignatario significa hablar de una relación comercial basada en la confianza.
El papel predominante del consignatario es recibir la mercancía del vendedor, manejar las formalidades de aduana y distribución en nombre del vendedor y, finalmente, entregar esta mercancía a la persona o entidad adecuada. Además de estas funciones básicas, puede proveer servicios adicionales dependiendo de las necesidades específicas del transaction particular.
Esto generalmente incluye:
- Almacenamiento de productos. El consignatario a menudo se encarga del almacenamiento adecuado de la mercancía hasta que es vendida.
- Manejo logístico. Esto puede involucrar el transporte hacia y desde su ubicación e incluso la organización de envíos más amplios.
- Ventas. El consignatario podría estar a cargo de encontrar clientes para los productos.
Como actores clave en el comercio internacional, los consignatarios deben cumplir con sus tareas manteniendo siempre intachables principios éticos y procesos profesionales. Para empezar, deben ser transparentes con todos los aspectos relacionados con las transacciones para evitar cualquier tipo de malentendido o fraude.
En segundo lugar, tienen que ser eficientes en realizar todas las tareas requeridas por su rol para garantizar una operación fluida y sin contratiempos. Además deben asegurarse cumplir con todas las leyes locales e internacionales respecto al manejo y transporte de mercancias.
Los contratos son elementos vitales en este proceso ya puedes establecer claramente los roles y responsabilidades tanto del vendedor como del comprador lo cual minimiza conflictos legales futuros.
Un aspecto importante a considerar es que no todos los bienes pueden ser entregados a un consignatario. Existe una amplia gama de productos restringidos que incluyen ciertos alimentos, medicamentos e incluso algunos tipos específicos de tecnología.
Ser un consignatario en el comercio internacional requiere conocer detalladamente todo sobre derechos aduaneros, logística internacional e incluso leyes comerciales internacionales para eficazmente efectuar transacciones y mantener satisfechos tanto al comprador como al vendedor.»