Absentista

El término «Absentista» se utiliza para referirse a una persona o entidad que posee una propiedad, como por ejemplo un inmueble o una tierra, pero que no la utiliza ni la explota para conseguir beneficios, sino que la mantiene sin actividad o uso productivo. En otras palabras, un absentista es alguien que no está presente ni activo en el aprovechamiento de sus bienes inmuebles o territoriales. Este comportamiento puede tener diversas consecuencias económicas y sociales, como las degradaciones urbanísticas o territoriales, la escasez de viviendas y locales disponibles en el mercado y la especulación inmobiliaria.

¿Sabes qué es un absentista? Es una persona o entidad que posee una propiedad, ya sea un edificio o terreno, pero que no lo utiliza ni lo explota para obtener beneficios. Básicamente, no está presente ni activo en el aprovechamiento de sus bienes inmobiliarios o territoriales. ¿Qué consecuencias tiene este comportamiento? Podría llevar a la degradación urbana o territorial, la escasez de viviendas y locales disponibles en el mercado y la especulación inmobiliaria.

En este artículo hablaremos sobre los ejemplos de absentista y si se puede sancionar a uno.

Ejemplos de absentista

Seguidamente te presentaré algunos ejemplos de absentismo laboral y cómo afectan a la empresa:

  • Ausencias injustificadas. Son aquellas en las que el empleado no presenta una excusa o justificación para faltar al trabajo. Pueden ser tardanzas sistemáticas, medias jornadas sin previo aviso o días enteros de ausencia sin razón aparente. Las consecuencias son obvias: la empresa sufre una falta de productividad y puede verse obligada a contratar personal temporal o hacer horas extras para cubrir las tareas del ausente.
  • Incapacidad laboral debida a enfermedad común. Del mismo modo, conocido como baja médica, es una incapacidad temporal en la que el trabajador está incapacitado por enfermedad común para asistir al trabajo durante un periodo determinado. En este caso, se debe presentar un certificado médico que justifique la ausencia y se tiene derecho a recibir una compensación económica durante este tiempo.
  • Incapacidad laboral debida a accidente de trabajo. Si el trabajador sufre un accidente mientras realiza su trabajo, tiene derecho a recibir una baja por invalidez temporal y tratamiento médico gratuito hasta su recuperación completa. En este caso, el absentismo no es voluntario y la empresa debe estar preparada para cubrir las tareas del ausente con otros empleados.
  • Permiso retribuido. Se trata de aquellos casos en los que el empleado tiene derecho a faltar al trabajo pero sigue recibiendo su salario completo. Ejemplos de permisos retribuidos son los días festivos nacionales o locales, los permisos por matrimonio o paternidad/maternidad, entre otros.
  • Absentismo crónico. Este tipo de absentismo es cuando un trabajador tiene un alto número de ausencias justificadas o injustificadas en forma consecutiva. Este caso puede ser causado por problemas personales, dificultades con el trabajo o conflictos laborales dentro de la empresa. Además del impacto evidente en la productividad, el absentismo crónico también afecta a la moral del resto del equipo y puede generar tensión entre los compañeros.

Como resumen, el absentismo laboral puede tener graves consecuencias para la empresa y los trabajadores. Por eso es importante estar al tanto de las causas detrás de este comportamiento y tomar las medidas necesarias para prevenirlo y/o solucionarlo a tiempo antes de que se convierta en un problema mayor.

¿Se puede sancionar a un absentista?

Es una pregunta interesante que suele surgir en el ámbito laboral. De entrada, es importante mencionar que la ausencia injustificada al trabajo es considerada una falta grave y puede acarrear consecuencias para el trabajador.

En primer lugar, la empresa tiene potestad para sancionar al empleado absentista. Para ello, debe seguir el procedimiento establecido en el convenio colectivo o en las normas internas de la empresa. Es recomendable notificar por escrito al trabajador de la falta cometida y otorgarle un plazo para presentar alegaciones.

En caso de que las ausencias injustificadas sean recurrentes, se pueden aplicar sanciones más graves como amonestaciones por escrito, suspensiones de empleo o incluso la rescisión del contrato laboral. No obstante, antes de tomar esta medida extrema, la empresa debe realizar un análisis riguroso y atender a las circunstancias individuales de cada caso.

Por otro lado, hay situaciones específicas que pueden justificar una ausencia sin aviso previo. Entre ellos se encuentran casos médicos graves (propio o familiar cercano), problemas familiares urgentes o situaciones imprevistas que no permitan avisar con antelación. En esos casos, se deben tomar medidas particulares que sean adecuadas a cada situación.

Es importante señalar también que los asuntos relacionados con las faltas laborales suelen estar regulados por leyes específicas del país o región donde se trabaja. Consecuentemente, es recomendable consultar la legislación y convenios colectivos pertinentes antes de emprender cualquier acción sancionadora.

Resumiendo: si bien puede haber excepciones legítimas que justifiquen una ausencia sin aviso previo, una empresa tiene derecho a sancionar a un trabajador por ausencias injustificadas recurrentes, siempre y cuando siga el procedimiento establecido en la legislación laboral vigente y respete los derechos de sus empleados.

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