Deflactor

El deflactor es un indicador económico que mide la variación general de los precios de todos los bienes y servicios finales producidos en una economía durante un período específico. Sirve para descontar el efecto inflacionario del crecimiento nominal, transformándolo en crecimiento real.

Si alguna vez te has preguntado cómo es posible determinar si la economía de un país está creciendo o decreciendo con precisión, estás en el lugar correcto. Hoy nos adentraremos en un término clave para entender estos fenómenos: el deflactor. A través de este indicador, podremos conocer los cambios genuinos en la producción económica del país, eliminando la «máscara» que las variaciones de precios puedan mostrar. En otras palabras, el deflactor es una herramienta que nos permite desentrañar cuánto del aumento (o disminución) observado en nuestras finanzas se debe a un crecimiento real y cuánto simplemente se debe a los cambios en los precios.
En este texto no solo profundizaremos por qué es necesario llevar a cabo ese proceso denominado «deflactar», sino que también te enseñaremos cómo hacerlo a través de ejemplos sencillos para que puedas comprenderlo mejor y aplicarlo cuando lo necesites.

¿Por qué es necesario deflactar?

Deflactar es un procedimiento necesario en el análico económico y financiero, de gran importancia para obtener una imagen más precisa de la evolución del valor real de las variables, más allá del simple registro de su valor nominal. Y ahora se detallan varias razones esenciales que resaltan la necesidad de deflactar:

  • Neutralización de la inflación. La deflación nos ayuda a neutralizar el efecto distorsionador de la inflación. La inflación es un incremento generalizado y sostenido del nivel medio nominal de los precios en la economía. Deflactar nos permite reducir o eliminar estos recortes nominales para tener una visión más clara y efectiva sobre el verdadero costo, precio o valor.
  • Comparaciones temporales. Permite realizar comparaciones temporales efectivas y precisas. En ausencia de deflacción, las comparaciones temporales pueden resultar defectuosas debido a las fluctuaciones en el nivel general de precios.
  • Análisis inter-territorial. La deflacción también se utiliza para comparar los datos económicos entre diferentes territorios con niveles distintos del índice de precios al consumidor (IPC).
  • Decisiones informadas. Facilita tomar decisiones informadas como inversores, analistas, formuladores políticos e individuos interesados en el desempeño económico.
  • Políticas socioeconómicas. Los gobiernos y los encargados formular políticas dependen especialmente del análisis del producto interior bruto ‘deflactado’ (PIB) para implementar políticas socioeconómicas correctivas.
  • Contribución al estudio macroeconómico. Hace contribuciones significativas al estudio macroeconómico mediante la decodificación correcta y clara del crecimiento real versus el crecimiento percibido marcado por distorsiones inflacionarias.

Es crucial tener presente que no deflactar puede conducir a interpretaciones engañosas acerca del crecimiento económico y dificultarnos entender correctamente si tal crecimiento está impulsado por un aumento real en los bienes y servicios producidos o simplemente refleja un aumento en los precios.

Por todo ello, la deflación emerge como una función inevitable para llevar adelante cualquier análisis sólido relacionado con economecía financiera.

Ejemplo para deflactar

Imaginemos una situación hipotética en la que se compró una casa en el año 2000 por un precio de $100,000. Veinte años después, en 2020, la misma casa se vendió por $300,000. Si bien, a primera vista parece que el valor de la casa se triplicó durante esos 20 años, necesitamos tomar en cuenta la inflación ocurrida durante ese tiempo. Para tener una imagen más clara y precisa del cambio real en el valor de la casa, necesitaremos deflactar el precio de venta.

Primero requerimos saber cuál fue la tasa de inflación durante esos 20 años. En este ejemplo imaginaremos que fue del 50%. Para aplicar esta tasa de inflación al precio original de venta y obtener el valor ajustado a la inflación, multiplicamos $100,000 x (1 + 0.50) = $150,000.

Ahora podemos comparar los $150,000 con los $300,000 para evaluar si realmente aumentó el valor de la propiedad. Al hacerlo vemos que en realidad hubo un aumento real del valor ya que aún después de ajustar según la inflación los $300,000 son mayormente superiores a los $150,000.

Esta es básicamente una explicación sencilla acerca cómo deflactar datos económicos puede proveer un análisis más certero y preciso sobre valores monetarios al paso del tiempo.

Puede seguirse este procedimiento cada vez que queramos entender cómo ha cambiado realmente algo debido a factores económicos naturales:

  • Determine o busque un índice apropiado para ajustar los precios.
  • Aplique dicho índice para adaptarse al valor presente o pasado dependiendo lo que quiera analizar.
  • Compare las diferencias entre estos precios ajustados y no ajustados.

Con estas herramientas estamos evitando interpretaciones erróneas por las fluctuaciones normales del dinero al paso del tiempo y ganaremos claridad sobre nuestras inversiones economías o decisiones financieras al largo plazo.

Deja un comentario