Círculo dorado

El «Círculo Dorado» es un concepto teórico desarrollado por Simon Sinek para explicar el patrón común detrás del éxito de organizaciones y líderes influyentes. Se compone de tres niveles concéntricos: ¿Por qué?, ¿Cómo? y ¿Qué?, cuyo principal énfasis recae en la interiorización y comunicación efectiva del propósito, causa o creencia que motiva a la empresa, prevaleciendo sobre los métodos y resultados específicos.

El mundo corporativo se rige por diversas teorías y métodos que buscan la optimización y el crecimiento sostenido, entre ellos destaca sin duda alguna, el «Círculo Dorado». Este concepto, planteado por Simon Sinek, se ha convertido en una suerte de herramienta clave para entender los patrones subyacentes tras las más exitosas y líderes influyentes de nuestra sociedad.

Profundizando en su esencia, el Círculo Dorado nos plantea un esquema dividido en tres niveles: ¿Por qué?, ¿Cómo? y ¿Qué?, cada uno con un rol específico dentro del funcionamiento organizativo. A diferencia de otras estrategias que ponen énfasis en los resultados tangibles o métodos utilizados para conseguirlos, este modelo destaca por poner encima de todo ello la visión fundamental o propósito intrínseco de la empresa. En su interior reside una indagación clara: ¿Por qué hacemos lo que hacemos?

Este artículo tiene pues como objetivo simplificar esta noción a menudo compleja. De manera sencilla aunque rigurosa desglosaremos cada uno de sus componentes -el ‘Por qué’, ‘Cómo’ y ‘Qué’- además ilustraremos su aplicación con ejemplos concretos para facilitar aún más su comprensión.

Así pues, acompañanos en este viaje hacia lo profundo del Círculo Dorado donde revelaremos cómo esta estrategia enfocada puede liderar a cualquier organización hacia un camino dorado lleno de éxito.

Objetivos del círculo dorado

El círculo dorado es un potente modelo estratégico que los negocios y las organizaciones usan para mantenerse inspirados, dirigir sus acciones y comunicarse con efectividad. Formulado por el gurú de marketing Simon Sinek, el círculo dorado defiende la teoría de invertir al tradicional proceso de pensamiento de las compañías cuando presentan su producto o servicio.

En lugar de comenzar con lo que hacen (que es lo más simple y evidente), Sinek sugiere que las empresas empiecen explicando por qué hacen lo que hacen. ¿Qué es lo que realmente les impulsa? Luego deben aclarar cómo logran este propósito antes de finalmente detallar qué es exactamente lo que producen o venden.

Los objetivos del círculo dorado son múltiples. Algunos relevantes son:

  • **Motivar desde dentro hacia fuera**. Siguiendo la lógica interna del círculo dorado (¿Por qué? → ¿Cómo? → ¿Qué?), se anima a las compañías a reflexionar sobre su misión antes que sobre su oferta, manteniéndose enfocadas en sus ideales y valores fundamentales.
  • **Inspirar acción**. Al compartir una causa inspiradora sobre por qué existen y lo que valoran, las empresas pueden movilizar a los clientes y empleados hacia un objetivo compartido.
  • **Diferenciarse**. Articulando claramente su ‘por qué’, las empresas pueden destacar entre la competencia y ganar lealtad debido a algo más profundo que solo la calidad del bien o servicio ofertados.
  • **Crear significado**. Describir el propósito detrás de su existencia en términos emocionales puede permitirle a una organización cultivar relaciones auténticas con colaboradores, proveedores, clientes e inversionistas por igual.
  • **Simplificar la toma de decisiones**. El círculo dorado proporciona un marco conceptual para tomar decisiones coherentes con el ‘por qué’ central del negocio. La consistencia en este sentido puede ser sumamente valiosa en términos reputacionales.

Debemos tener presente siempre que no se trata solamente acerca del hecho económico bruto: vender cosas para generar ganancia,sino fundamentalmente, entender cuál es la razón profunda de nuestro proyecto comercial e inculcar este valor positivo en cada aspecto y detalle del mismo para así construir confianza y forjar relaciones duraderas basadas en convicciones profundas compartidas además del intercambio monetario per se.

Recuerda siempre: gente no compra solo lo que haces sino principalmente porqué tú lo haces. Aprovecha bien tus recursos lingüísticos para transmitir tu visión porque esto permitirá te posiciones mucho más fuerte en un mercado cada vez más colmado e indiferenciado donde aquellos proyectos auténticos emergen como faros entre tantas luces desvaídas. Por eso hoy el Círculo Dorado se torna herramienta clave tanto para emprendedores como grandes corporaciones ya consolidadas.

Partes del círculo dorado

El círculo dorado es un modelo estructurado en tres componentes principales: el por qué, el cómo y el qué. Estas tres secciones son la columna vertebral de este principio y juegan roles cruciales para entender su aplicabilidad, especialmente en negocios y liderazgo.

Comenzando con la parte central del círculo dorado, tenemos el «Por qué».

  • El Por Qué. Es aquí donde reside la motivación principal detrás de cualquier iniciativa o proyecto. Representa la causa, la creencia o incluso, la razón de ser de una empresa. Los líderes que conocen su ‘por qué’ pueden inspirar a los demás más fácilmente ya que este componente establece un propósito claro que va más allá de simplemente ganar dinero. El ‘por qué’ directamente se relaciona con emociones profundas e impulsos innatos que dan sentido al trabajo.

En las próximas líneas en el segundo anillo del círculo dorado encontramos el «Cómo».

  • El Cómo. Esta parte se encarga de definir los métodos y procesos que utilizará tu organización para cumplir tu propósito o “por qué”. No solo hablamos de estrategias comerciales tangibles sino también de aspectos culturales únicos como tus principios fundamentales, ética laboral y estilos de liderazgo. Considerarlo cuidadosamente puede marcar una diferencia significativa entre simplemente hacer las cosas y hacerlas bien respetando lo que representa tu organización.

el último anillo externo del círculo está formado por «El Qué».

  • El Qué. Este componente define los productos o servicios específicos que ofrece tu empresa al mercado,es decir, lo tangible que permite a los consumidores interactuar directamente con tu marca. Aunque es esencial para el funcionamiento efectivo del negocio e inevitablmente lo primero visible para la audiencia, busca recordar siempre: no debe oscurecer ni dominar sobre tu ‘por qué’ ni tu ‘cómo’,porque estos últimos son los verdaderos motores diferenciadores frente al público.

Asimilar completamente cada elemento del círculo dorado permite trazar una ruta clara y eficiente hacia el éxito comercial y humano ya sea proporcionando respuestas claras a preguntas clave o motivando genuinamente al equipo involucrado a trabajar dicotómicamente para un propósito colectivo compartido más allá del beneficio financiero.

Ejemplo

Imaginemos a Apple Inc, una de las empresas más rentables y exitosas del mundo. En este caso, el «por qué» sería su creencia en desafiar el status quo. Para ellos, se trata de pensar de manera diferente,es decir, tienen una filosofía innovadora e inconformista arraigada en cada acción que emprenden.

En las próximas líneas, cómo lo hacen se entiende en la forma en que este pensamiento disruptivo se materializa a través de la creación de productos y servicios altamente innovadores. Diseñan sus dispositivos para ser intuitivos, elegantes y completamente superiores en diseño y utilidad.

Y por último viene el «qué», que se refiere a los productos o resultados tangibles del «por qué» y el «cómo». Esto incluirá su gama de iPhones, iPads, Macs y otros servicios tecnológicos emergentes.

Por tanto:

  • El círculo dorado comienza con el «por qué». Desafiar el status quo e innovar.
  • Seguido del «cómo». Creando productos y servicios bellamente diseñados e intuitivos.
  • Finalmente llega al «qué». Sus excepcionales líneas de productos como iPhones, iPads and Macs.

Este modelo puede también ser aplicado no solo a empresas sino también a marcas personales o cualquier otra entidad que busque construir una identidad sólida basada en valores fundamentales.

Por ejemplo, podríamos tomar un autor hipotético llamado John Doe quien está trabajando en su marca personal como escritor:

  • Su «por qué» podría ser. Inspirar a la gente para vivir vidas más significativas.
  • Su «cómo» podría ser. A través de compartir historias emocionantes y profundas reflexiones sobre la humanidad
  • Y finalmente su «qué». Los libros publicados que reflejen tal creencia e implementación.

Es importante recalcar que una aplicación auténtica del círculo dorado requiere integridad total desde el núcleo (el por qué) hacia fuera (el cómo) hasta llegar al producto final (el qué). Una desconexión entre estos elementos puede llevar al fracaso del mensaje o dejar lugar a percepciones negativas desde audiencias críticas.

La eficacia del círculo dorado reside en su simplicidad – articula perfectamente la necesidad fundamental para las entidades (ya sean negocios u otras) para tener claro los valores inherentes antes de tratar con asuntos prácticos o tácticos dependiendo la evolución cambiante del mercado.

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