Activo no corriente es un término contable que se refiere a los bienes tangibles, como edificios, maquinaria e inversiones a largo plazo, que están en posesión de una entidad y que se mantienen para generar beneficios durante más de un periodo contable.
¡Bienvenido al artículo sobre activos no corrientes! Los activos no corrientes son elementos de valor que se adquieren y mantienen con el objetivo de generar beneficios a largo plazo. Estos pueden incluir edificios, equipamiento, propiedades intelectuales, inversiones financieras y mucho más.
En lo que sigue abordaremos las características del activo no corriente, así como su clasificación. Entonces ¡empecemos!
Características del activo no corriente
Los activos no corrientes son aquellos bienes de una empresa que se mantienen para uso a largo plazo. Estos activos se caracterizan por tener una vida útil superior a 12 meses y suelen ser utilizados en la producción de bienes o servicios.
Las características principales de los activos no corrientes son:
- Son costosos. El valor inicial de los activos no corrientes es alto dado que están pensados para uso a largo plazo.
- Se deprecian con el tiempo. A diferencia de los activos corrientes, los no corrientes tienden a disminuir su valor con el paso del tiempo. Por lo tanto, es necesario considerar este factor al momento de realizar análisis financieros.
- Pueden ser tangibles e intangibles. Los activos no corrientes pueden ser tangibles (bienes físicos) como terrenos, maquinarias o edificios, o bien intangibles (derechos) como marcas registradas, patentes o software.
- Suelen presentar ciclos económicamente estables. A diferencia del resto de los activos, los no corriente mantienen su valor durante periodos prolongados sin ser afectado significativamente por las fluctuaciones del mercado. Esta característica hace que sean ideales para inversionistas conservadores y para empresas que requieren estabilidad financiera en el mediano o largo plazo.
- Requieren mantenimiento periódico. Dado que el propósito principal de estas adquisiciones es lograr resultados financieroes a largo plazo, es necesario realizar un mantenimiento constante para evitar dañarlas y garantizar su buena funcionalidad durante su vida útil.
Clasificación del activo no corriente
La clasificación del activo no corriente es una parte importante de la contabilidad financiera. Esta clasificación ayuda a los inversores y acreedores a entender mejor el valor de una compañía en el mercado, así como las tendencias de los activos que posee. Hay tres categorías principales para clasificar los activos no corrientes:
- Activos intangibles. Son aquellos que no se pueden ver o tocar, pero tienen valor para la compañía. Esto incluye cosas como patentes, marcas registradas, derechos de autor y software.
- Activos financieros no corrientes. Están relacionados con finanzas y cuentan con grandes cantidades de dinero invertido en forma de acciones, bonos y otros instrumentos financieros a largo plazo.
- Propiedad, planta y equipo (PPE). Están formados por edificios e infraestructuras físicas, maquinaria y equipamiento utilizados para producir bienes o prestar servicios a largo plazo.
Los activos no corrientes generalmente se mantienen durante más de un año por lo que suelen ser considerados como activos de largo plazo,sin embargo, hay algunas excepciones específicas según la jurisdicción fiscal donde se encuentre la empresa. Además, algunas empresas optan por designar algunos activos como propiedad mantenida para la venta (PMV). Esta categoría incluye bienes raíces o inventarios que han sido adquiridos con el propósito de venderlos en el futuro cercano o mediano plazo para generar ingresos o ganancias adicionales.
Es importante destacar que los activos no corrientes deben ser evaluados periódicamente para determinar si hay alguna variación significativa en su valor actual respecto al valor original establecido en los libros contables del negocio. Esta práctica es necesaria ya que puede influir directamente en el desempeño financiero de las empresas.