El análisis situacional es una herramienta que se utiliza para evaluar y comprender la situación actual de una empresa, organización o negocio. Consiste en recopilar y analizar información relevante de diferentes áreas como el mercado, la competencia, los recursos disponibles, las tendencias del entorno y las fortalezas y debilidades internas. Con el análisis situacional se busca identificar oportunidades, amenazas, ventajas competitivas y puntos críticos a mejorar para poder tomar decisiones estratégicas más acertadas y apuntar hacia el éxito en un futuro cercano.
El análisis situacional es una técnica que se utiliza para entender la situación actual en la que se encuentran empresas u organizaciones. Es como realizar un diagnóstico de salud, pero para el mundo empresarial. La idea es recolectar y analizar información importante de distintos ámbitos, desde el mercado en el que se desenvuelve la compañía, hasta sus recursos internos. Las fortalezas y debilidades también deben ser evaluadas.
Con toda esta información recopilada, el objetivo del análisis situacional es identificar oportunidades de crecimiento y desarrollo, amenazas que pudieran afectar negativamente a la empresa, puntos críticos a mejorar y ventajas competitivas que podrían ser aprovechadas.
Existen diversas herramientas para llevar a cabo un análisis situacional efectivo. Algunas se enfocan en la dimensión financiera mediante indicadores como los estados financieros o los flujos de caja,otras valoran las tendencias emergentes en el entorno sociocultural o las preferencias del mercado.
Una de las herramientas más utilizadas viene dada por “Las 5 fuerzas de Porter” Este marco analiza aspectos clave como: poder negociador con proveedores y clientes,amenaza de nuevas empresas entrantes al mercado,competición sectorial,influencia del poder sobre clientes-proveedores sustitutivos y barreras para entrada/normalización del mercado.
A continuación exploraremos cómo aplicar adecuadamente un análisis situacional para tu empresa o negocio; mostrándote ejemplos concretos de algunas herramientas disponibles por ahí; así como hablar acerca «Las 5 fuerzas de Porter».
Análisis situacional de una empresa
El análisis situacional de una empresa es una herramienta clave para entender el estado actual en el que se encuentra una compañía y, por tanto, para tomar decisiones informadas sobre su futuro. Este análisis abarca varios aspectos fundamentales que describiremos a continuación:
- Análisis de mercado. Esta parte del análisis se centra en estudiar los factores externos que afectan a la empresa, como los competidores, las tendencias del mercado y los cambios económicos. Es importante conocer detalladamente la situación de los competidores directos e indirectos en la industria, qué es lo que están haciendo bien y cuáles son sus debilidades. Además, es fundamental estar al día con las tendencias del mercado y evaluar cómo podría cambiar en un futuro cercano.
- Análisis interno. Este tipo de análisis hace referencia a la evaluación interna de aspectos como las fortalezas y debilidades de la compañía, así como su capacidad para gestionar recursos estratégicamente y responder ante los desafíos actuales o futuros.
- Análisis financiero. Este tipo de evaluación se centra en estudiar la realidad financiera actual y futura de la empresa mediante métricas financieras específicas tales como margen neto de ganancias respecto a ingresos brutos, EBITDA (Ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización), ratios PN (Patrimonio Neto) / PCT (Pasivo Corriente Total) o activo corriente / pasivo corriente.
- Análisis DAFO. Este tipo de análisis contrasta los puntos fuertes (Fortalezas) y flacos(mencionados anteriormente) establecidos por el análisis interno, con los factores positivos y negativos del mercado mencionados en el análisis de mercado.
Conclusión: Un buen análisis situacional de una empresa es clave para conocer la situación interna y externa de la compañía. Este proceso no solo permite comprender su estado actual, sino que también es fundamental para tomar decisiones bien fundamentadas sobre el futuro de la organización. Por ende se recomienda a las empresas llevar un registro constante del mismo ya que los cambios en el entorno y la propia empresa van a influir tanto en oportunidades como en desastres empresariales futuros.
Ejemplos de herramientas de análisis situacional
Existen muchas herramientas que pueden utilizarse para realizar un análisis situacional, pero aquí te mostramos algunos ejemplos que son muy útiles para empresas y organizaciones:
- Análisis PESTEL. Este modelo se enfoca en el análisis de los factores políticos, económicos, sociales, tecnológicos, ambientales y legales que afectan a la empresa. Al realizar este análisis se pueden identificar oportunidades y amenazas en el entorno externo.
- Análisis FODA. Se trata de una herramienta muy popular que ayuda a analizar las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas de la empresa.
- Matriz BCG. Esta matriz es especialmente útil para ayudar a las empresas a analizar su cartera de productos o servicios. Permite identificar aquellos con mayor potencial de crecimiento (estrellas) y aquellos que requieren más atención (vacas lecheras o perros).
- Análisis competitivo. Con esta herramienta se puede estudiar a los competidores directos e indirectos de una empresa. Se pueden analizar aspectos como precios, calidad del producto/servicio ofrecido, estrategias publicitarias y promocionales.
- Mapa perceptual. Este recurso visual sirve para analizar cómo los consumidores perciben la marca o el producto en relación con otras marcas en el mercado.
- Gráfico temporal o histórico. Analiza los indicadores financieros, productivos o comerciales a lo largo del tiempo permitiéndonos observar con detalle cómo ha evolucionado una variable específica.
Cada una de estas herramientas es útil para abordar diferentes aspectos que conforman la situación actual de una empresa u organización,por tanto, es importante que se estudie detalladamente cuál es la adecuada en función del contexto y del objetivo de análisis.
Las 5 fuerzas de Porter en el análisis situacional
Las 5 fuerzas de Porter son una herramienta muy valiosa en el análisis situacional de una empresa. Esta metodología fue desarrollada por el profesor Michael Porter de la Harvard Business School y se enfoca en evaluar las condiciones competitivas del mercado en el que opera una compañía. Seguidamente, se detallan las cinco fuerzas:
- Rivalidad entre competidores existentes. Esta fuerza se refiere a la intensidad de la competencia que existe dentro del mercado y cuánto poder tienen los competidores actuales para influir en el comportamiento del mercado. Si hay muchos jugadores fuertes, la competición será más dura.
- La amenaza de nuevos entrantes. Esta fuerza se refiere a la facilidad con la que nuevos jugadores pueden entrar en un mercado y empezar a operar. Lo que puede desafiar a los competidores actuales si no están preparados para ello.
- Amenaza de productos sustitutos. Esto habla sobre cómo los productos o servicios similares pueden limitar las oportunidades comerciales que existen para un negocio dado.
- Poder negociador de proveedores. Esto describe cómo las personas o empresas que proporcionan materiales esenciales para hacer funcionar un negocio, como materias primas o equipamiento especializado, pueden influir sobre los márgenes empresariales.
- Poder negociador de los clientes. Finalmente, esta última fuerza habla sobre cómo los clientes pueden exigir condiciones comerciales favorables dado su peso e importancia dentro del proceso productivo o bien mediante su relación directa con nuestros servicios.
El análisis sistemático de estas cinco áreas nos permitirá identificar fortalezas y debilidades dentro del panorama competitivo del mercado al cual estamos involucrados. Adicionalmente, al considerar cada fuerza por separado, podemos desarrollar estrategias más efectivas para contrarrestar amenazas y potencializar nuestras oportunidades. En definitiva, esta herramienta es una de las mejores formas de evaluar nuestra posición en el mercado e identificar puntos donde debemos mejorar o ser más cautelosos si no queremos perder terreno frente a nuestros competidores directos.